Exposición digital sumerge a visitantes en obra de Van Gogh
ARTE. Ayer se estrenó la experiencia que recorrerá el mundo.
Cuarenta y cinco minutos de inmersión total en la obra del pintor impresionista Vincent van Gogh es lo que ofrece "Beyond Van Gogh" ("Más allá de Van Gogh"), una exposición digital que inició en Miami su recorrido mundial e invita a "sentir" el arte del genio holandés de una manera distinta a la de un museo.
"Es más espectacular, podemos imaginar muchas cosas y nos tomamos algunas libertades", dice Mathieu St-Arnaud, del afamado Normal Studio de Montreal y director creativo y diseñador visual de esta exposición que ayer abrió sus puertas al público en los Ice Palace Studios de Miami.
Entre esas libertades está hacer parpadear al Van Gogh de uno de los muchos autorretratos que invaden las paredes y el piso de la enorme sala donde los visitantes viven la experiencia "Beyond Van Gogh".
Antes pasan por otra sala en la que conocen al artista a través de sus propias palabras y de textos sobre su vida y obra que aparecen sobreimpresos en una serie de pantallas con fondos de sus cuadros.
En la pantalla de bienvenida se lee: "El amor siempre causa problemas, es verdad, pero hay que aceptar a su favor que da energía". La frase esta extraída de una carta que el artista escribió a su hermano Theo van Gogh en 1884.
Sumergirse totalmente
Envuelto en las imágenes cambiantes y en la banda sonora que las acompaña, en la que se reconoce a The Beatles y Don McLean entre otros muchos artistas, "pues con Van Gogh todas las músicas funcionan", el visitante puede llegar a pensar que solo él ha visto el humo que asciende con formas ondulantes de la pipa de otro de los autorretratos.
La sala tan pronto es un campo de girasoles como una noche estrellada, un paisaje de los Países Bajos o unos almendros en flor en el sur de Francia.
De repente la luz cambia, los colores y las formas también y las cámaras de decenas de celulares empiezan a disparar. Cada 45 minutos todo empieza de nuevo.
Es un desafío enorme hacer una exposición sobre un pintor tan reconocido sin contar con las pinturas mismas, subraya St-Arnaud.
No obstante, admite que más difícil sería hoy en día juntar todas las pinturas representadas en la exposición (unas 300) en un solo lugar y mucho más pagar las cifras astronómicas que exigirían las aseguradoras.