"Nunca he sido muy adicto a difundir mi trabajo artístico"
El artista chillanejo Luis Guzmán Molina, quien a sus 80 años dedica su confinamiento a pintar en su casa junto a su esposa Alicia, apuntes tomados previos a la pandemia. El pintor inauguró en marzo la muestra titulada "Acuarelas del sur del Mundo", en el Centro Financiero de Dubái, a pesar de que no viajó para resguardar su salud, su hijo Claudio se encargó personalmente de llevar la exposición a Emiratos Árabes.
-¿Cómo ha vivido el confinamiento por la pandemia, ha visto afectado al escenario general por las cuarentenas?
-Yo no he visto afectado mi trabajo artístico en cuarentena, afortunadamente además de poder hacerlo, muchas personas se han acercado a mi casa para adquirir mis obras, por eso el trabajo ha estado vigente. Agradezco poder mantenerme trabajando, esa es la razón por la que seguimos vivos y ese trío de mente, corazón y mano, permite que la creatividad avance. No sé cómo será para los artistas que viven en otras ciudades, pero en mi caso la cuarentena ha sido más bien grata.
-Antes de la pandemia, pudo trabajar formando artistas en la Escuela de Difusión Artística Claudio Arrau ¿Cómo fue esa experiencia?
-Fue muy buena esa experiencia, pero breve. El taller completó en pocos días la matrícula, tuve como 18 estudiantes de entre 15 y 50 años que estaban interesados en aprender la técnica de las acuarelas. Tuvo que ser pospuesta sí, porque no podemos trabajar en conjunto, pero estamos con todas las conversaciones para poder retomar el taller cuando mejore la situación sanitaria.
-En cuanto a su muestra en Dubái ¿Cómo se gestó esta, que se siente ser el primer artista chileno en exponer en ese lugar?
-Yo no viajé a Dubái, mi hijo junto a su nieto financió el viaje y pudieron vender algunas acuarelas, fue muy exitosa, porque yo también pude recibir algo de eso. Esto nació porque los compañeros de mi hijo que emigraron a los Emiratos se interesaron en las acuarelas, allá es una actividad muy seria con altos niveles de exigencia. Así que a los 80 años ¿qué más se puede pedir? La muestra contó con 23 obras, que representan diferentes lugares de nuestro país, desde Putre a los Campos de Hielo y fue expuesta en una galería ubicada en el corazón del distrito financiero de la ciudad árabe, rodeada de importantes galerías, sedes empresariales.
-¿Tiene proyectadas más muestras a nivel internacional?
-He realizado casi 60 exposiciones en el mundo, mi hijo piensa hacer exposiciones en otros lugares, pero yo me quedo en Chillán trabajando tranquilo. Ahora estoy trabajando en una de las antiguas tejedoras, trabajo que ya no se ve por la pandemia, aquí trabajo en mi cuadrito con apuntes que tenía antes de todo esto. Mientras me acompañen las manos y la mente aquí voy a seguir. Lo que me interesa es mantenerme vigente, a los 80 años no se le puede pedir más a la vida.
-Usted tiene gran trayectoria trabajando en folclor y las artes ¿cree que falta fomentar estas actividades?
-La verdad es que me sorprende que en algunos diarios se publique sobre mi trabajo, nunca he sido muy adicto a difundir mi trabajo artístico. Por lindas casualidades de la vida terminé enseñando folclore hispanoamericano en español en la Universidad Brigham Young en Estados Unidos, la clase fue tan buena para estos estudiantes de todas partes del mundo que me pidieron continuar, pero les dije que no porque quería volver a mi país. También trabajé en la Universidad de Puebla, en México y en Núremberg, Alemania donde he realizado como 11 exposiciones ya deben estar cansados del asunto (risas).
-Pero para usted no para el arte, de alguna manera, aunque no le fascine la difusión de su trabajo igual lo encuentran ¿cómo es eso?
-Hace poco fui contactado por la Asociación de Acuarelistas de Chile, en la Universidad de Concepción donde realizaron un documental muy lindo sobre la historia de la acuarela en Chile, desde el siglo XVIII y XIX y ahí apareció mi trabajo como uno de los "maestros de la acuarela", fue muy inesperado, nunca pensé que me iban a catalogar así.
Luis Guzmán pasa su cuarentena resguardándose de la pandemia, con sus acuarelas en temáticas de Chile, siempre volviendo a su querido Chillán donde pinta la cordillera, Cobquecura y el campo, siempre con una visión distinta.
"La pandemia no ha sido tan ingrata conmigo, yo me estoy cuidando como viejo ya porque estamos expuestos a cualquier cosa, ya tengo las dos dosis y la vacuna de la influenza, para el resfrío también el tinto con aspirina es muy bueno", indica entre risas, aunque de eso toma muy poco, confiesa.
"Yo no he visto afectado mi trabajo artístico en cuarentena, afortunadamente además de poder hacerlo, muchas personas se han acercado a mi casa para adquirir mis obras, por eso el trabajo ha estado vigente". "La muestra contó con 23 obras, que representan diferentes lugares de nuestro país, desde Putre a los Campos de Hielo y fue expuesta en una galería ubicada en el corazón del distrito financiero de la ciudad árabe".