"Queremos descentralizar el desarrollo de la ciencia y generar redes con investigadores de regiones"
Este académico e investigador de la Ufro, director del Laboratorio de Estrés y Salud, lidera hoy una sociedad de doctores que intenta posicionar la ciencia psicológica en búsqueda de nuevos conocimientos y su aplicación en políticas públicas. A lo largo de Chile, advierte, hay 14 doctorados y un volumen importante de investigaciones que intentan explicar, sobre todo, cómo "la conducta" influye en la salud mental y física.
La psicología de la salud, cuyo norte apunta a entender cómo la conducta de una persona puede influir en la evolución de un tratamiento médico o cómo los distintos procesos psicológicos y culturales pueden explicar el comportamiento de las personas en relación a su salud física y mental, es una de las áreas de investigación que hoy por hoy forma parte del quehacer de la Sociedad de Científica de Psicología, que en Chile lidera un académico de la Universidad de La Frontera.
Se trata del profesor y doctor en psicología de la Salud, Manuel Ortiz Parada, quien por estos días lidera también el doctorado de Psicología de la Ufro y el Laboratorio de Estrés & Salud, dos espacios fundamentales en la generación de nuevos conocimientos desde la disciplina, tema que es de sumo interés para la nueva directiva de la entidad nacional, cuya meta radica en descentralizar el desarrollo científico y hacer visible los aportes de los investigadores locales con miras a que sus descubrimiento sean sustento para la toma de decisiones, y ayuden a la instalación de políticas públicas cada vez más atingentes.
Desde su oficina en Temuco, Ortiz comparte los objetivos de la sociedad científica que preside, las investigaciones que ocupan a sus asociados y a estudiantes de doctorado, y el aporte de las regiones al desarrollo científico de Chile.
- Usted preside la Sociedad Científica de Psicología de Chile creada en 2011. ¿Quiénes la integran hoy y qué persigue esta organización?
- Es una sociedad conformada mayoritariamente por académicas y académicos presentes en las universidades nacionales donde hay departamentos o escuelas de psicología. Todos los socios tienen el grado de doctor en psicología aunque también tenemos como socios a estudiantes de programas de doctorado en psicología o ciencias afines, entendiendo que nos interesa trabajar con los futuros doctores que le darán continuidad a esto. La sociedad tiene por objetivo fomentar el desarrollo de la psicología en Chile y cuando hablamos de esto nos referimos a psicología científica, porque cuando uno trata de explicar la conducta en el amplio sentido de la palabra la gente le presta más atención a situaciones que no son científicas. O sea, si llevas a a la TV a una persona que lee el tarot y a un psicólogo, la mayoría tiende a creerle más al tarotista. Entonces, uno de los objetivos es promover esta ciencia en Chile porque es un camino que vale la pena estimular y desarrollar.
- ¿Qué tan desarrollada está la investigación científica en psicología dentro del país?
- Existe un muy buen nivel de la investigación científica en psicología en Chile y eso lo puedes ver en que hay 14 doctorados afines a la ciencia psicológica, distribuidos de norte a sur; eso genera un polo de desarrollo importante. La psicología, por ejemplo, tiene su propio grupo de evaluación en la Agencia Nacional de Investigación y Desarrollo, ANID. Eso también habla de que tiene un lugar importante dentro de las ciencias sociales. Sobre todo, los fenómenos que han ido ocurriendo en los últimos dos años han hecho que la psicología vuelva al lugar importante que tiene, porque ha servido para explicar lo que ha sucedido con el estallido social, desde una perspectiva más social y todo lo que tiene que ver con salud mental a propósito de la pandemia por covid-19. Diría que la ciencia en psicología está bien desarrollada en Chile (…). Tenemos un desarrollo muy interesante y un potencial grande también. Tal vez lo que falta - y que le falta a todas las ciencias - es más presupuesto para la investigación.
- ¿Qué tan apretadas se ven disciplinas como la psicología a la hora de partirse la torta de inversión en ciencia?
- Claro que se hace más pequeño el presupuesto y se vuelve más competitiva la actividad también, porque hay más doctores compitiendo para acceder a esos fondos. Ese es un gran tema pendiente.
- ¿Cuáles son las áreas o el rango de investigaciones básica y aplicada en los que trabaja esta sociedad en Chile?
- La sociedad representa a todos los psicólogos a nivel nacional y dentro de eso la psicología tiene muchas ramas. Hay psicología social y está toda la psicología clínica que va más bien por el lado de la salud mental de las personas, pero también existen áreas que son muy interesantes como lo relacionado con la neurociencia y la psicología de la salud, que trata de explicar la interrelación entre la salud física y salud mental, y que antes se veía por separado. Hay temas que son los clásicos de la psicología y temas emergentes dentro del desarrollo científico como la neurociencia, la psicología de la salud, la psicología económica y de consumo que es muy relevante. La psicología es la ciencia que estudia el comportamiento humano y la conducta está básicamente en la base de todo, es decir, en el consumo, la salud, los actos de riesgo, la violencia; y la psicología va a poder explicar, predecir y, eventualmente, ofrecer soluciones a problemas que involucran el comportamiento humano.
ESTUDIOS
- En muchos aspectos Chile sigue centralizado. ¿Qué participación tienen las universidades de regiones en el aporte al desarrollo de esta ciencia?
- Tienen un rol muy relevante para descentralizar y captar capital humano avanzado, y estudiantes que se quieren formar como investigadores. Yo creo que las universidades de regiones, además, tienen un rol fundamental en el sentido que están en los territorios y conocen mejor la diversidad cultural que puede ofrecer el vivir en otros territorios con sus particularidades. En ese sentido, como sociedad quisimos tener una representación diversa de directores de distintas universidades, porque queremos descentralizar el desarrollo de la ciencia y generar redes con investigadores de regiones del país.
- ¿Qué temas o situaciones investigadas hoy en los doctorados llaman su atención?
- En el doctorado de psicología que tenemos en Universidad de La Frontera tenemos una línea de investigación en psicología cultural y procesos de salud. Lo que investigamos ahí es cómo distintos procesos psicológicos y culturales pueden explicar el comportamiento de las personas en relación a su salud física y mental. Por ejemplo, cuanto piensas en el Chile actual hay más de un 70% de población con obesidad y donde la principal causa de muerte son las enfermedades cardio metabólicas; nosotros sabemos que una forma de explicar esto tiene que ver con variables genéticas, eso explica en parte el problema, pero no es lo único. También sabemos que uno de los factores principales que está en la base de esto es la conducta, es decir, el sedentarismo, los malos hábitos de alimentación, la exposición sostenida y crónica a estresores psicológicos, y sabemos que esas variables junto a las genéticas ejercen efectos importantes y aumentan la probabilidad de que la gente sea diagnosticada con enfermedades crónicas. Y lo otro es que cuando das vuelta el ángulo, también sabemos que las personas diagnosticadas con enfermedades crónicas son personas que pueden tener una excelente calidad de vida, porque la medicina terapéutica ha mejorado, los fármacos y los dispositivos son más efectivos, pero no sirve de nada si es que la gente no adhiere a esos tratamientos.
- Denos un ejemplo de esto…
- Yo no saco nada tratar a un paciente con VIH si no adhiere a triterapia. En general, esto pasa con todas las enfermedades crónicas, donde el aspecto conductual es un talón de Aquiles, porque si no se maneja bien eso hace que los resultados esperados en salud no prosperen, pese a que el Estado gasta dinero en fármacos y especialistas para ello. Se agranda el problema.
- Usted es doctor en psicología de la salud y se sabe que lleva a cabo una investigación que con pacientes diabéticos. ¿Hacia dónde apunta la búsqueda de conocimientos allí?
- Tenemos dos estudios en estos momentos con pacientes diabéticos, uno es con pacientes de diabetes tipo 2 y otro con tipo 1. Ahí la terapéutica es diferente. Los 'tipo 2' tienen un tratamiento más centrado en fármacoterapia, actividad física y dieta, y los diabéticos tipo 1 ocupan insulina exógena. En el caso de los pacientes de diabetes tipo 2, estamos trabajando con dos tesistas del doctorado, Belén Salinas y Jorge Schleef, para evaluar el rol que tienen las relaciones interpersonales en la adherencia al tratamiento (…). Y otro estudio novedoso, que haremos con Sebastián Neira, otro tesista del doctorado, implica estudiar la adherencia en pacientes que usan bombas de insulina o dispositivos de infusión continua. Queremos ver la influencia que tienen los mensajes normativos en la adherencia al tratamiento (…). Si tenemos buenos resultados habría información para transferir e implementar, eventualmente, en políticas públicas ligadas a campañas normativas.
- Usted lidera también el Laboratorio de Estrés & Salud, ¿en qué trabaja esta unidad?
- Este es un laboratorio que creé al alero del doctorado de Psicología y Departamento de Psicología en 2014, cuando regresé de mi doctorado en la Universidad de California; y lo que nosotros queremos allí es responder básicamente a la pregunta de ¿cómo el estrés psicológico y los estresores psicológicos en general se asocian con desenlaces en salud? Hay mucha evidencia que muestra que las personas que perciben más estrés cotidiano o que están sometidos situaciones crónicas de estrés son personas que se enferman antes, personas que tienen mayor carga de la enfermedad y se recuperan con menos velocidad; en general, experimentan más dificultades. Y eso, en el fondo, ha sido estudiado más como un autorreporte (…) y lo que queremos es evaluar otros mecanismos acerca de por qué el estrés hace que la gente se enferme más. Entonces, llevamos a personas al laboratorio, hacemos experimentos con ellos y tomamos muestras biológicas que nos permiten dar respuestas más robustas a por qué las variables psicológicas se introducen debajo de la piel… Cómo algo que eventualmente no vemos sí se puede ver cuando se gatilla un tipo de enfermedad… Vemos allí un polo de desarrollo científico en el sur del país.
- De vuelta a la Sociedad Científica de Psicología de Chile, ¿cuáles son los desafíos que se ha planteado la actual gestión?
- Lo que nos gustaría es difundir mucho más la ciencia psicológica en Chile. En general esos espacios se los han tomado pseudo ciencias y como ha estado más en el tapete la salud mental ahora último queremos aprovechar la contingencia para proyectar nuestro trabajo. Es decir, primero difundir y, luego, descentralizar y potenciar la investigación que se hace en regiones. Con esto no queremos decir trabajar en forma aislada, sino en forma colaborativa con miembros de otras universidades del país.