Las vacaciones podrían ser una oportunidad para potenciar el desarrollo del lenguaje y las habilidades comunicativas de los niños en un contexto natural y motivante. Muchas veces creemos que la estimulación del lenguaje se realiza en situaciones que deben ser estructuradas, pero, la verdad es que diversos estudios demuestran que no necesariamente debe ser así, el aprendizaje se produce en todos los contextos de la vida diaria y cualquier situación puede servir para estimular el lenguaje, por ejemplo, en el supermercado, una caminata de mañana por el barrio, un viaje en auto, jugando en con sus amigos, en la playa, etc.
Les propongo diferentes juegos que pueden ser desarrollados en un contexto natural para los niños y niñas: pueden amenizar el trayecto de cuando van en el auto, cantando canciones de animales, frutas, verduras, etc… así pueden aprovechar de aprender nuevo vocabulario y estimular la memoria auditiva, en niños más grandes podrían crear historias con personajes y objetos que ven en el camino, así los niños pueden ir complejizando las oraciones que utilizan, además pueden leer cuentos en familia y hacer preguntas acerca de éstos, así se puede estimular la comprensión auditiva, la atención, la organización del discurso, etc.
Aprovechando que hay mayor tiempo libre, pueden hacer un paseo por el campo, por la montaña, por la playa o por su barrio, donde pueden jugar al "veo veo", por ejemplo dan la pista de un color, un sonido y/o primera sílaba con la que comienza el nombre del objeto que deben buscar, así se puede estimular procesos previos a la lectoescritura, también pueden incrementar vocabulario, complejizar oraciones como "mira, el auto verde" "el auto azul" "el árbol es pequeño, etc.; otra forma de estimular habilidades linguísticas, es planificar lo que se realizará durante el día, organizando la información en secuencias temporales, por ejemplo, "primero tomaremos desayuno, luego saldremos a jugar, después almorzaremos, en la tarde veremos una pelicula y en la noche cenaremos".
También pueden utilizar situaciones más cotidianas, como poner la mesa, hacer la comida, asi se puede trabajar la comprensión de instrucciones, ordenar y narrar la información; otra forma de estimular la adquisición de nuevo vocabulario, es hacer una lista antes de ir al supermercado de los alimentos que necesitaran comprar y estando en el supermercado, pueden caracterizar e ir trabajando la definición de de estos alimentos "la manzana, la manzana es una fruta, es de color rojo o verde y sirve para comer".
Carolina Labraña Villalobos Académica Fonoaudiología, Universidad Andrés Bello