Bolivia: 10 años de cárcel a Jeanine Áñez por asumir el poder tras la renuncia de Morales
JUICIO. Los hechos del llamado caso "Golpe de Estado II" ocurrieron en 2019. Gobierno dijo que se sienta "un precedente histórico" para que "nunca una persona se autonombre presidente". Evo Morales dijo que pena contra expresidenta interina "es benigna".
La expresidenta interina de Bolivia, Jeanine Áñez, fue condenada a última hora del viernes a 10 años de cárcel por incumplimiento de deberes y resoluciones contrarias a la ley cuando asumió el poder en 2019, en medio de una crisis postelectoral. Para el Gobierno de Luis Arce y el oficialismo, esto constituyó un "golpe de Estado" contra Evo Morales.
Los hechos ocurrieron entre el 10 de noviembre, día en el que Morales renunció a la Presidencia, y el 12, cuando la entonces senadora asumió el poder de forma transitoria.
El Tribunal Primero de Sentencia de La Paz anunció de manera virtual la condena contra Áñez por los delitos de incumplimiento de deberes y resoluciones contrarias a la Constitución y dijo que el texto completo de la resolución se dará a conocer en una audiencia el próximo 15 de junio.
El juicio por el caso "golpe de Estado II" se debatió sobre las acciones de Áñez cuando era segunda vicepresidenta del Senado y asumió en 2019 la Presidencia de forma supuestamente irregular, según el Gobierno de Luis Arce y el partido gobernante, Movimiento al Socialismo (MAS), tras las renuncias de Evo Morales y de toda la línea de sucesión presidencial.
Precisamente, el expresidente Evo Morales escribió en sus redes sociales que "pese a las mentiras, chicanas e incluso actuaciones para decir que estaba enferma o a punto de morir, la justicia sentenció que Añez y sus cómplices asaltaron el poder con un golpe de Estado".
Morales, de hecho, consideró que los diez años de condena son "una pena benigna en relación al daño que causaron a la democracia".
Precedente
El Gobierno de Bolivia sostuvo que con la condena se sentó un "precedente histórico", aunque también anticipó que es apenas el inicio de los procesos contra la exmandataria interina, a quien también enjuiciarán por las muertes durante la crisis de 2019, que en un mes llegaron a 23.
"Hoy se hizo historia. La señora Jeanine Añez fue sentenciada a 10 años en el caso Golpe II por la autoproclamación y la vulneración de las normas de sucesión constitucional en nuestro país el año 2019 en el Golpe de Estado", escribió en sus redes sociales el ministro del Interior boliviano, Eduardo del Castillo.
"Este precedente debe servir para que nunca, bajo ningún motivo, una persona se autonombre presidente del país", dijo Del Castillo, cuyo despacho fue uno de los acusadores.
Por su parte, el ministerio de Justicia señaló en un comunicado que "se ha completado una fase decisiva en el proceso de recuperación de la democracia" y defendió que el órgano Judicial "en el ejercicio de su independencia dictó una sentencia" enmarcada en "los principios y garantías del debido proceso".
"La sentencia establece ante la historia que la vía democrática y constitucional es la única ruta para llegar al poder", sostuvo.
La cartera de Justicia también recalcó que el proceso se enmarcó en las leyes y aseguró que organismos internacionales como la Comisión Interamericana de Derechos Humanos verificaron que se respetaron los derechos humanos y "garantías jurisdiccionales" de la exmandataria.
Hija de Áñez: "GROSERO"
Carolina Ribera, hija de Áñez, dijo que este "juicio ha sido grosero" y que al momento del anuncio de la sentencia la expresidenta interina se encontraba sin ninguno de sus abogados, que al igual que todas las partes escucharon la determinación por vía remota.
Alain de Canedo, uno de los abogados de Áñez, también señaló que como el anuncio del juez fue en la noche, a "esa hora está restringida la entrada en la cárcel" donde está recluida. La expresidenta deberá cumplir la condena en la cárcel de Miraflores, donde está detenida de manera preventiva desde hace más de un año, y en los alegatos finales el viernes en la mañana dijo que "me han negado el derecho a estar presente hasta en mi propio juicio, si es que así puede llamársele a este simulacro. Me han negado todo y tratado peor que a nadie pero fui, soy y seré la Presidenta Constitucional que asumió su deber tras la huida del cobarde (Evo Morales)".
Áñez tuvo que enfrentar todo el juicio de manera virtual desde la cárcel, pues según las autoridades era una medida preventiva por la pandemia y luego argumentó que existía un "riesgo de fuga".
La Misión en Bolivia de la ONU para los Derechos Humanos en Bolivia dijo lleva a cabo "una observación internacional sobre el proceso judicial contra Jeanine Áñez y otros ocho imputados", y hará sus observaciones "una vez que la sentencia haya sido emitida y leída en su integridad".