Alza en precio de las bencinas
Durante los últimos meses las gasolinas no han dado tregua y esto se ha traducido en sistemáticos aumentos en los precios. Alrededor de la mitad del precio que pagan los conductores por la bencina corresponde a impuestos.
Existe preocupación en los consumidores y en especial en los automovilistas, por las sostenidas alzas en los precios de las gasolinas. La de esta semana pasada fue de 20,5 pesos por litros.
Analistas han señalado que de no mediar una acción de parte del Gobierno, las bencinas pronto llegarán a 1.500 pesos, lo que no solo impacta en el bolsillo de los consumidores sino que también tiene consecuencias en la inflación, porque los efectos se transmiten y se multiplican en toda la economía. Algunos parlamentarios han llamado al Gobierno generar medidas que permitan bajar el precio de las bencinas, a través de una modificación del impuesto específico a los combustibles. El ministro de la Secretaría General de la Presidencia, Giorgio Jackson, ha indicado que se estudia la posibilidad de que los consumidores individuales, que tienen su auto y se mueven para trabajar o para llevar a sus hijos al colegio y que tienen un consumo por lo general bajo de gasolina, puedan tener una devolución de este impuesto específico.
Rebajar o eliminar el impuesto específico es una idea que se ha planteado con fuerza en los últimos meses, debido a los altos precios que han alcanzado las gasolinas. Incluso hay proyectos que han presentado parlamentarios y que se encuentran detenidos en el Congreso. El pasado 19 de abril la Sala de la Cámara de Diputados aprobó un proyecto de resolución que solicitó al Presidente Gabriel Boric eliminar de manera permanente o transitoria el impuesto específico. Entonces, se estimó que eliminar el tributo en cuestión permitiría una rebaja de más de 400 pesos en el precio de la gasolina a los consumidores.
Durante los últimos meses las gasolinas no han dado tregua y esto se ha traducido en sistemáticos aumentos en los precios. Alrededor de la mitad del precio que pagan los conductores por la bencina corresponde a impuestos, donde una fuerte incidencia la tiene el tributo específico. El impuesto específico en las actuales condiciones deteriora aún más la condición de desempleo y caída de los ingresos de las familias, a la vez que se transforma en un generador de mayor inflación. Este es un problema que requiere de una solución definitiva ahora y no de paliativos momentáneos.