"Una constitución no puede ser aprobada o rechazada por diez artículos buenos o diez malos"
ACTUALIDAD. La vida en sus múltiples roles se mantiene activa para Harboe. Ajusta sus horas para atender compromisos políticos, educativos y personales, mientras escribe dos libros vinculados de manera directa a sus experiencias políticas.
Felipe Harboe es uno de los políticos que se han formado y forjado al calor de la democracia del país. Por 32 años izó las banderas y los ideales de la centro izquierda, pero luego de ser convencional y de trabajar en la nueva propuesta de la Carta Magna no se siente representando ni por la constitución vigente ni por la propuesta actual, por lo que apuesta a una tercera vía de la cual no espera ser parte, pero que aspira que finalmente se concrete.
-¿Qué opina sobre la propuesta del Presidente Gabriel Boric de la posibilidad de convocar una Convención Constitucional, si la opción del Apruebo no gana?
- Una gran mayoría de los ciudadanos decidió en el plebiscito de entrada que el actual texto constitucional no era representativo de una gran mayoría de la sociedad y que Chile necesitaba un nuevo pacto social. Y por tanto, si la propuesta de pacto social que emanó de la Convención Constituyente no es satisfactoria, lo que corresponde es que exista otro proceso constituyente que logre, ojalá proponer un texto que genere mayor nivel de unidad; cohesión social, política y cultural en el país. En consecuencia, yo creo que es una obligación del Presidente (Gabriel) Boric en el evento que gane el Rechazo convoque a un nuevo proceso. Ahora será nuestra ciudadanía la que defina el mecanismo, no es el Presidente el que define por sí mismo.
-¿Esto representaría una nueva erogación de recursos público?
-Probablemente, lo que pasa es que creo que Chile está viviendo un proceso de transición social, política, cultural que no es ajeno a lo que está pasando en el resto de Latinoamérica y en el mundo en general. Estamos evolucionando como sociedades en mecanismo de democracia más directa, más participativa. Creo que la irrupción de la era digital y los mecanismos de comunicación directa entre ciudadanos y autoridades han generado un cambio en los escenarios y por tanto es insoslayable para los países adecuar sus estructuras institucionales a las nuevas realidades culturales, tecnológicas, sociales de los países.
-¿Usted cree que el chileno común está realmente informado sobre la propuesta constitucional?
Primero, creo que lamentablemente en Chile el nivel de formación cívica y educacional sigue siendo muy bajo y, por tanto, probablemente la decisión del 4 de septiembre va a ser en un 20% por el texto y un 80% por el contexto. Esto significa que ese contexto va a influir abiertamente, primero, las circunstancias económicas personales y familiares que cada persona tenga al momento de la elección.
Y como segundo elemento de contexto que va a estar en consideración el 4 de septiembre, es el de la inseguridad. Creo que hoy día la gran crisis que tenemos en el país es de inseguridad, no sólo vinculados a temas de delincuencia, crimen organizado, donde Chile lamentablemente se ha ido latinoamericanizando. Hemos pasado de la delincuencia común, de la oportunidad, al crimen organizado.
-¿Cuáles son los principales argumentos que usted esgrime para votar el Rechazo y qué aspecto rescataría de esta propuesta constitucional?
-Lo primero que rescató es el proceso, más allá de todas las complicaciones de un conjunto de tonterías que hicieron algunos convencionales, de algunos maximalismo, de algunas puestas en escenas inadecuadas. Más allá de todo eso reivindico el proceso, porque Chile tenía que reencontrarse, y creo que la posibilidad de muchas personas que nunca tuvieron la oportunidad de expresar sus sentimientos, sus dolores, sus ocupaciones y también sus modelos de sociedad o visiones de sociedad tuvieron la oportunidad de hacer y eso creo que es positivo para el país.
Ahora respecto del resultado, no estoy conforme, porque si bien creo que el texto tiene cosas muy positivas, creo que tiene otras cosas igualmente negativa. Un texto constitucional no puede ser aprobado o rechazado porque tiene tres, cuatro o diez artículos buenos o el mismo número de artículos malos.
Las constituciones son un pacto social, constituyen una visión de sociedad, constituyen la forma en que se organiza una sociedad y donde se reconoce los valores que supuestamente nos unen como sociedad. Y lamentablemente cuando uno observa este texto, parte de una base que a mí no me gusta, un carácter extremadamente identitario. Creo que es un texto que más bien fortalece aquello que nos divide y no aquello que nos une como sociedad.
En segundo lugar, creo que tiene muchas cosas positivas en materia de derechos sociales, avanzan en la idea, que por lo menos yo he levantado durante muchos años, la idea de consagrar un estado social y democrático de derecho, pero continuación de esa declaración establece 103 derechos fundamentales, transformándose en una de las constituciones más extensas en materia de derechos.
-¿Usted regresaría para redactar el nuevo pacto social de Chile, si se vuelve a convocar?
- No, son cosas distintas. Primero, descartemos absolutamente que el Rechazo significa mantener la actual constitución. El Rechazo no es de derecha, yo no lo voy a regalar el Rechazo a la derecha, el Rechazo es un rechazo en función de un nuevo texto, pero bueno.
El Rechazo es unidad, el Rechazo es más igualdad, descentralización, de verdad no más pegas política. Es una oportunidad nueva con un nuevo proceso , creo que deberían haber nuevos actores y actrices con reglas importantes donde se mantengan los criterios de paridad y otros, obviamente con representación de los pueblos originarios porque es muy importante.
Pero donde la gente va a tener conciencia de lo que significa y cuáles son las implicancias de una nueva Convención Constitucional. Ahora será la gente la que decida el mecanismo porque también cuando el Presidente dice, aquí lo que hay es que si no gana el Rechazo, vamos a convocar un nuevo proceso constituyente, obviamente, pero será la ciudadanía en la que va a elegir cuál es el mecanismo en virtud, sobre el cual se va a generar esta nueva Constitución.
Es decir, la cuestión constitucional no termina el 4 de septiembre, porque lamentablemente en la Convención no fuimos capaces de proponer un texto que generará amplios niveles de consenso en el país. Entonces, así como la Constitución del 80 no nos representa a una gran mayoría del país, está propuesta, tampoco nos representa a otra parte de la sociedad.
Su visión del gobierno
-¿Usted cómo evalúa la gestión de Gobierno?
- Creo que un gobierno con cuatro meses ya, ya no es un gobierno en rodaje, creo que más bien es un gobierno en práctica. Tenía la vara muy baja porque el anterior lo hizo muy mal, pero aquí lo están haciendo aún peor. O sea, lo que estamos viendo en materia de delincuencia, en materia legislativa, en relaciones internacionales es francamente preocupante y eso no debiera poner contento a nadie, eso debiera preocuparnos a todos. Porque más allá de quien ejerza de Presidenta o Presidenta de la República, quiero que a mi país le vaya bien, si al gobierno le va bien al país le va bien.
Pero veo mucha incompetencia, por un lado, y mucha soberbia, y esa mezcla de incompetencia con soberbia o de falta de experiencia y soberbia extremadamente explosiva, genera una situación de falta de gobernabilidad que es bien compleja.
Cuando uno conversa con los alcaldes y se da cuenta del retraso en la transferencia de recursos. O muchas veces también se les producen esto a los propios gobernadores regionales a quienes se les generan un cuadro muy complejo dada la relación que tiene con el gobierno central, que muchas veces están retrasando las asignaciones presupuestarias para la ejecución del Fondo Nacional de Desarrollo Regional (FNDR).
Bueno, vaya usted a saber el porcentaje, ejecución presupuestaria y no siempre es responsabilidad del gobernador regional. Porque resulta que hoy en día la subsecretaría de Desarrollo Regional y la Dirección de Presupuesto donde se realizan las asignaciones presupuestarias de los decretos. Hay un retraso bastante considerable, entonces creo que se requiere también que el gobierno tenga mayor nivel de competencia y preocuparse de generar los incentivos adecuados para que hayan nuevas inversiones.
Hoy día, sabe usted que el año 2022 se redujo en un 50% las aprobaciones de permisos de construcción en el país. Eso no da lo mismo, el problema que se produce al final del día, es que esa reducción se traduce en que hay menos proyectos, al haber menos proyectos hay menos compra de materiales, hay menos empleo. Entonces se va generando un cuadro de crisis económica en los sectores más populares lo que es mucho más delicado.
Por eso es tan importante que las señales que den las autoridades sean las señales de personas de gobierno. Creo que tienen que entender que cuando una persona, un dirigente político es parte de un gobierno, esa persona es dirigente pierde la oportunidad de expresarse individualmente y cuando habla, habla en nombre del gobierno y esos dichos traen consecuencias económicas, etcétera.
Su vida actualmente
-Cómo está la agenda de Felipe Harboe en este momento, ¿a qué dedica su tiempo?
- Estoy recorriendo el país explicando con el texto en la mano, para que no haya dobles interpretaciones, ¿cuáles son los alcances y las consecuencias del Apruebo o el Rechazo del texto?.
Segundo, estoy en mis labores académicas; soy profesor de la Universidad Católica, hago clases en dos diplomados y tercero, estoy ejerciendo la profesión de abogado.
En paralelo, estamos trabajando en la reorganización política, del un centro político en nuestro país, en el centro social, el centro socialdemócrata, social cristianos, social liberal que nos vamos a juntar, y espero que prontamente podamos tener buenas noticias.
-¿La vida política sigue activa?
-Si, sigue activa, ayudando y moviendo nuevos liderazgos. Creo que cada cosa en su tiempo, pero creo que es uno debe tener tiempo para dedicarlo a los proyectos personales. Ahora, estoy escribiendo dos libros, entonces creo que es importante también avanzar en eso.
-¿Un adelanto del contenido de los libros?
-Uno de los libros es en dos tomos, y trata sobre el proceso constituyente. El primer tomo es donde se dice la relación del acuerdo del 15 de noviembre, todo el tras bambalina, cuenta un conjunto de detalles bastante sabrosos de las negociaciones, las conversaciones por teléfono, de los WhatsApp, de cómo se portó éste, de cómo se portó el otro, cuándo estuvo a punto de fracasar.
El segundo tomo de ese mismo libro es el que tiene relación con el proceso Constituyente, propiamente. La Convención Constitucional y la experiencia en ella.
Y el segundo libro es el que dice relación, más bien de mi experiencia política y las obras y concreciones que hicimos tanto como subsecretario, como diputado y senador por la región de Ñuble.
"Yo veo hoy día mucha incompetencia por un lado y mucha soberbia, y esa mezcla de incompetencia con soberbia o de falta de experiencia y soberbia extremadamente explosiva genera una situación de falta de gobernabilidad que es bien compleja" "La cuestión constitucional no termina el 4 de septiembre, porque lamentablemente en la Convención no fuimos capaces de proponer un texto que generará amplios niveles de consenso en el país"
Más de 3 décadas dedicada a la política
Al revisar la hoja de vida de Felipe Harboe, en ésta destacan sus hitos políticos, durante sus años de colegio llegó a ser representante estudiantil, lo que le dio el piso para avanzar y formar parte de la primera directiva juvenil del Partido Por la Democracia (PPD), en el cual militó por 32 años y luego logró dirigir la Federación de Estudiantes de la Universidad Central (FEUCEN). Para después ocupar distintos cargos durante la gestión del Presidente Ricardo Lagos que fueron desde subsecretario hasta jefe de Gabinete, sin dejar de un lado sus labores como subsecretario de Interior donde fue ratificado por la Presidenta Michelle Bachelet. Ex diputado, senador y constituyente, nació en Holanda en 1972.