Efe
Los dichos del presidente argentino, Alberto Fernández, sobre el fiscal que pidió una condena en una causa de corrupción que se le sigue a la vicepresidenta, Cristina Fernández, provocaron el repudio y la presentación de denuncias judiciales de la oposición por considerarlos una amenaza y un avasallamiento al poder judicial.
El mandatario comparó la situación del fiscal Diego Luciani -que el lunes pasado solicitó una condena de 12 años de prisión y la inhabilitación perpetua para ejercer cargos públicos para Cristina Fernández en un juicio por corrupción- con la del fiscal Alberto Nisman, que apareció muerto con un disparo en la cabeza en 2015, horas antes de presentar una denuncia en el Congreso contra la misma Fernández, que entonces presidenta.
"Realmente alentar la idea de que le puede pasar al fiscal Luciani lo que le pasó a Nisman… Miren hasta acá lo que le pasó al fiscal Nisman es que se suicidó, hasta acá no se probó otra cosa, yo espero que no… que no haga algo así el fiscal Luciani", dijo Alberto Fernández el miércoles en la noche en un reportaje televisivo.
Reacciones de fiscales
La Asociación de Fiscales y Funcionarios del Ministerio Público Fiscal de Argentina repudió "enfáticamente" los dichos del presidente argentino y consideró "temerario" el "paralelismo" que trazó el mandatario entre Luciani y Nisman, al recordar que la Justicia investiga como "asesinato" la muerte del fiscal Nisman, en la noche del 18 de enero de 2015, horas antes de exponer su denuncia contra Cristina Fernández por presunto encubrimiento a varios sospechosos de terrorismo iraníes.
Además, los fiscales recordaron que la Constitución argentina impide al presidente ejercer funciones judiciales, arrogarse el conocimiento de causas pendientes o restablecer las fenecidas, por lo que no puede efectuar injerencia alguna siquiera a través de críticas, halagos o comentarios.
El propio fiscal Luciani dijo este jueves que "es preocupante el grave avasallamiento de las instituciones" por parte del presidente y del ministro de Seguridad, quienes "deberían ser los primeros en practicar los valores republicanos" y "no deben olvidarse de que representan a toda ciudadanía", en un comunicado.
El presidente Alberto Fernández aclaró ayer que hubo "una tergiversación" de sus dichos y que su referencia al fiscal Nisman apareció porque fue parte de la pregunta de los periodistas.
"En mi Gobierno no amenazamos ni perseguimos ni operamos ni sobre fiscales ni sobre jueces y, por lo tanto, nadie tiene que sentirse en riesgo", dijo Alberto Fernández a radio El Destape, donde también afirmó haber recibido amenazas de muerte que investiga la Policía Federal.
En 2017, el mandatario de Argentina había señalado en un documental que "hasta el día de hoy dudo de que Nisman se haya suicidado", contradiciendo su versión actual.
El expresidente de Argentina Mauricio Macri acusó a Fernández, de "violentar" la Constitución.
"Esta destrucción de la palabra presidencial ha sido muy dañina, encima atribuyéndose facultades de jurista que no tiene y violentando sistemáticamente la Constitución, como lo hizo anoche una vez más", aseguró Macri, una de las figuras principales de la coalición opositora de Juntos por el Cambio.
La Coalición Cívica, integrante de Juntos por el Cambio, anunció que denunciará al presidente por "sedición y amenazas", en tanto la líder del PRO, otro de los integrantes de la oposición, Patricia Bullrich, dijo que denunciarán al presidente por "alentar un golpe" contra la Corte Suprema, contra los jueces que están juzgando hechos de corrupción del kirchnerismo y por "amenazar" a Luciani.
Apoyo internacional
Sumándose a otros líderes sudamericanos, esta vez el presidente mexicano, Andrés Manuel López Obrador, acusó a la derecha de buscar "desacreditar" a la vicepresidenta de Argentina, Cristina Fernández.
"No conozco a detalle el proceso jurídico contra Cristina, pero es evidente que está metida ahí la derecha, el conservadurismo, porque es la forma de desacreditar. Se lo hicieron a los de Podemos en España, a Lula (expresidente de Brasil), porque así son", manifestó.
AMLO firmó junto a otros mandatarios latinoamericanos una carta de apoyo a Fernández, donde catalogan de "injustificable persecución" la causa. En el documento también aparecen Gustavo Petro, Luis Arce y Alberto Fernández.
"Es preocupante el grave avasallamiento de las instituciones. Deberían ser los primeros en practicar valores republicanos"
Diego Luciani, Fiscal del juicio a vicepresidenta