Meloni en ofensiva contra familias del mismo sexo
ITALIA. Niega inscripción de los hijos de esas parejas nacidas en el extranjero.
El colectivo LGTBIQ de Italia está movilizado ante la ofensiva contra las familias homosexuales impulsada por el Gobierno de Giorgia Meloni, que en los últimos días ha rechazado el certificado de paternidad europeo y exige a los ayuntamientos (municipios) que dejen de inscribir a los hijos de parejas del mismo sexo nacidos en el extranjero.
Este jueves se comenzaron a tramitar tres proyectos de ley para declarar "delito universal" la maternidad subrogada efectuada en el extranjero. Se trata de un obstáculo para las familias homosexuales en Italia, uno de los pocos estados de Europa occidental en los que el matrimonio igualitario no es legal.
"La gestación subrogada es la excusa, Italia nunca ha regularizado la paternidad de las parejas del mismo sexo, no lo hizo en el 2016 cuando se aprobó la única ley LGTBIQ, que es la de las uniones civiles", apuntó a EFE la activista Alessia Crocini, presidenta de la asociación Familias Arcoiris.
Miles de personas se manifestaron en Milán después de que el alcalde, el progresista Beppe Sala, confirmara que detenía el registro de hijos de parejas del mismo sexo nacidos en el extranjero por indicación del Ministerio del Interior. Milán lo hacía mediante un vacío legal, junto a un puñado de municipios italianos, como el de Padua, cuyo regidor, Sergio Giordani, continúa haciéndolo a pesar de todo: "Los alcaldes estamos llamados a actuar con sentido común para proteger la dignidad de las niñas y los niños y sus derechos fundamentales", dijo.
Pero el Tribunal Supremo dictaminó en diciembre que los nacidos en otro país por gestación subrogada sólo serán reconocidos como hijos en Italia mediante el proceso de adopción y la ley que rige la procreación asistida en Italia data de 2004, amparando solo estos procedimientos a parejas heterosexuales con problemas de fertilidad.
Según Crocini, el objetivo es hacerles "la vida más complicada", pues los padres italianos con hijos que tienen un pasaporte extranjero, no pueden inscribirlos en el sistema italiano, de modo que no pueden acudir "al pediatra o a la escuela pública".
Un día después de pedir a los ayuntamientos que cesaran las inscripciones, el Senado rechazó el "Certificado Europeo de Paternidad" propuesto por la Comisión Europea para que todos los países de la Unión Europea (UE) reconozcan la paternidad de una familia de otro Estado miembro.