Biden dice que Putin es más débil tras rebelión y un ataque ruso deja al menos 11 muertos en una pizzería
KRAMATORSK. "Está perdiendo la guerra en casa. Es un paria en todo el mundo", agregó.
El presidente estadounidense, Joe Biden, afirmó que su homólogo ruso, Vladimir Putin, es más débil tras la rebelión armada que protagonizó el Grupo Wagner el pasado fin de semana, mientras en el frente de batalla un ataque dejó 11 civiles muertos en una pizzería de Kramatorsk, en Ucrania.
Antes de subirse a su helicóptero, Biden respondio a un periodista que preguntó al mandatario si Putin estaba más débil tras el motín armado, ante lo que el líder estadounidense contestó: "Sé que lo está, sí".
Ante otra pregunta, Biden dijo que es "difícil" saber cómo el motín ha afectado a Putin, pero consideró que "claramente está perdiendo la guerra" en Ucrania. "Está perdiendo la guerra en casa. Es un paria en todo el mundo", subrayó.
El Grupo Wagner es una compañía de seguridad privada rusa propiedad de Yevgueni Prigozhin, contratada por el Kremlin para la guerra de Ucrania, y un grupo de sus mercenarios iniciaron una sublevación el pasado viernes. Tras declararse en rebeldía ocuparon la ciudad de Rostov y enviaron cuatro columnas hacia Moscú.
Un día después, el propio líder del grupo Wagner anunciaba su retirada, tras la mediación del líder bielorruso Alekandr Lukashenko, y el retorno de sus combatientes a las bases permanentes. Tras un acuerdo con el Kremlin, Prigozhin se trasladó a Bielorrusia y no podrá haber cargos contra él.
Masacre
Ayer, al cierre de esta edición, los servicios de rescate ucranianos habían contabilizado ya 11 víctimas mortales como resultado del ataque ruso que alcanzó la noche previa una pizzería de la ciudad de Kramatorsk, situada cerca del frente en la provincia de Donetsk.
Entre los fallecidos había tres niños y al menos 56 personas resultaron heridas.
Entre los heridos se encuentra la escritora ucraniana Victoria Amelina, que cenaba en la pizzería con una delegación de personalidades de Colombia, entre ellas el escritor Héctor Abad, el ex-Alto Comisionado para la Paz de Colombia Sergio Jaramillo y la periodista Catalina Gómez, que salieron prácticamente ilesos, aunque el Gobierno de Gustavo Petro condenó el ataque.