Mujer y tecnología
En las últimas décadas se han logrado avances significativos que dejan ver un futuro prometedor para la inclusión de las mujeres dentro del sector tecnológico. No obstante, aún prevalecen desafíos en los que hay que seguir trabajando para lograr una verdadera igualdad de género.
Muchas mujeres siguen escogiendo carreras que no tienen que ver con la ciencia, la tecnología, la ingeniería y las matemáticas, conocidas también como STEM, a pesar de que en estas especialidades se encuentran los empleos del futuro. Según ONU Mujeres, hasta 2020 solo el 35% de los estudiantes de carreras y programas del campo de STEM son mujeres.
Es vital, entonces, que desde las empresas exista un compromiso conjunto para abordar la disminución en esta disparidad y avanzar en la construcción de un futuro más equitativo desde la perspectiva de género, donde la diversidad se vea reflejada en cada toma de decisión, desarrollo innovador, ideación de proyecto y en el propio futuro de la tecnología.
Las bases están dadas para que en los próximos años las cifras de mujeres en puestos directivos y que emergieron de carreras STEM continúen creciendo de forma favorable, solo es cuestión de que, desde la base familiar, siga la transición del antiguo rol que limitaba a la mujer al hogar, por uno integral en el que mujeres y hombres participan en igualdad de condiciones, tanto profesionalmente como en casa.
Es necesario seguir direccionando esfuerzos para impulsar la formación y crecimiento profesional de las mujeres en las carreras de ingeniería desde su temprana edad, inspirado, construyendo interés y confianza en esta industria que ocupa un rol más que importante para el futuro de la humanidad. La comunicación y la escucha activa son fundamentales para entender las necesidades y los distintos puntos de vista, y poder así brindar oportunidades de valor para el desarrollo de los talentos.
Nadia González, vicepresidente de Thales para Latinoamérica
Esquema ideológico
A la fecha se han conocido diversos casos, en todo el país, de millonarios traspasos de recursos a diversas fundaciones, todas con un origen común, y con el mismo modus operandi: tráfico de influencias, abuso de poder y redes para defraudar al Estado y favorecer a los suyos.
¿Pero estamos acaso frente a unas mentes brillantes para defraudar al Estado, a las personas y la fe pública? La respuesta es no y la encontramos en España.
El año 2018 el actual diputado español, Íñigo Errejón, uno de los fundadores de Podemos junto con Pablo Iglesias, develaba la estrategia de la colectividad para dejar "colocados" a los suyos, en diversas reparticiones públicas, organizaciones, fundaciones y lo que fuera, en caso de perder elecciones.
En aquella ocasión, Errejón decía a los presentes que "para los compañeros que gobiernan en Barcelona, o que gobiernan en Zaragoza o que gobiernan en Madrid, ¿cuál sería una tarea?: asumir, cuando perdamos las elecciones, dejar sembrado instituciones populares que resistan y, por cierto, donde refugiarse cuando gobierne el adversario" afirmaba Errejón indicando la importancia de que existieran asociaciones de diversos tipos, que alguna utilidad, pero fundamentalmente sirvieran al objetivo político.
Si bien sería injusto sentar un manto de oscuridad en torno a organizaciones que trabajan con y por las comunidades, lo cierto es que el daño está hecho, la fe pública resentida y las desconfianzas acrecentadas. Todo, mientras sólo vemos y conocemos la punta de un iceberg mucho más abultado de lo que se piensa.
Rodrigo Durán Guzmánl
Delincuencia
Realmente lo que estamos viendo es un milagro y de los grandecitos. Fíjese usted que las lluvias, temporales, inundaciones, cota cero y todo aquello, terminó con la delincuencia en todas sus formas.
Desde hace varios días no se ha escuchado por radio ni visto en los interesantes comentarios de televisión, nada respecto a este tema de la delincuencia.
René M. Cifuentes Bobadilla