Redacción
En condiciones normales, llegar a Minas del Prado desde Coihueco no toma más de 20 minutos, sin embargo, las lluvias torrenciales que afectaron a la región, sumado a la crecida del Río Niblinto, arrasaron con la única ruta que conecta con el sector, por ende, parte del equipo educativo del jardín infantil Integra Minas Del Prado, quedó sin la posibilidad de brindar educación parvularia a los niños y niñas del sector.
Ana María Flores, directora del establecimiento desde hace 8 años y Elvira Arias, educadora del nivel heterogéneo que atiende a 19 niños y niñas del sector, se quedaron sin la posibilidad de llegar al único jardín infantil del sector, ya que ambas residen en Coihueco.
Una de las principales preocupaciones de la directora del jardín infantil era cómo la emergencia climática afectaría a los niños y niñas. "Sabía que, lamentablemente, la casa de una familia había resultado anegada, y que habían tenido que trasladarse al albergue, pero dentro de todo, ellos estaban bien", dijo. Mediante la labor del equipo educativo que vive en Minas del Prado, como María Insunza, manipuladora de alimentos, e Iris Ferrada, auxiliar de servicios pudieron constatar que el jardín infantil no había tenido fallas ni filtraciones: "Fue gratificante darnos cuenta que nuestro establecimiento no había sufrido ningún daño, por lo que nos pusimos manos a la obra, para atender a los niños y niñas, apenas las condiciones del tiempo lo permitieran", confirmó la directora.
Por su parte, Cindy Barros, apoderada de Matías (que asiste al jardín infantil Minas del Prado), agradeció la reapertura del jardín infantil ya que su hijo preguntaba todos los días cuándo podría volver: "Matías es hijo único y el jardín le da la posibilidad de compartir con otros compañeros. Le gusta, se divierte, se distrae y le permite aprender cosas nuevas, que no puede aprender en la casa".
Felipe Opazo, director de Fundación Integra Ñuble, destacó el trabajo de los equipos en contexto de emergencia y el apoyo que entregan a sus comunidades educativa, incluso a distancia. "En casos de emergencia, los jardines infantiles bridan un lugar seguro y de contención socioemocional para niñas y niños, y ofrecen apoyo a las familias en este momento tan importante, por lo cual, apenas se abrió el camino que permitiera el paso del equipo de Integra, quisimos estar allí".
El director regional agregó que los comités de emergencia de Integra sesionaron a diario, desde el viernes 23 de junio, para realizar el levantamiento de la situación de trabajadoras/es, niñas/os, en paralelo, las direcciones de las regiones afectadas trabajaron articuladamente con los equipos educativos.
En la Región de Ñuble, la emergencia climática obligó a suspender la atención de cuatro de los 53 jardines infantiles de Integra, por problemas en infraestructura o inconvenientes en la accesibilidad, productos de las lluvias, según información proporcionada por la institución.
4 de los 53