Patricio Vera Muñoz

La venta libre de medicamentos en las ferias libres que funcionan en Chillán, no sólo se ha transformado en un problema para las autoridades, sino también en un lunar que consideran, debe extirparse.

En ese sentido, el alcalde Camilo Benavente detalló que han realizado diversos procedimientos de decomiso de estas medicinas que se venden sin receta ni control médico alguno, contándose hasta ahora 6 operativos ejecutados durante el último mes en la ciudad.

"Nosotros hemos identificado esta situación. Uno de los sectores donde ya se realiza con regularidad es en el Persa Monterrico, por lo que mañana (hoy) vamos a desplazarnos con nuestros equipos preocupados de este tipo de comercio ilegal", aseguró añadiendo que incluso, se han detectado medicamentos que no corresponden al producto que se está vendiendo, lo que podría derivar en una intoxicación u otro problema de salud más grave y hasta mortal.

Por su parte, el delegado presidencial Gabriel Pradenas, aseveró que los municipios poseen las herramientas legales para combatir este tipo de comercio irregular. Por ende, las fiscalizaciones que se ejecuten deben ser coordinadas con el ente municipal.

"En ese sentido, estamos muy atentos a las solicitudes del alcalde al respecto. Por otra parte, es relevante señalar que hemos levantado una mesa de seguridad para analizar este tema, donde incorporamos a los gremios de la salud. Vamos a sesionar la próxima semana, a fin de normar, regular y fiscalizar esta situación en terreno para ajustarnos a la norma", precisó.

La autoridad regional dijo que la instancia multisectorial a desarrollar será conducente a diseñar líneas de acción más definidas para combatir esta problemática.

Cabe señalar que el peligro que reviste comprar medicamentos en las calles y sin regulación alguna es una alerta que han levantado diversos organismos del mundo de la salud, considerando que el 90% de los fármacos que se venden en el país requieren contar con una receta médica. De hecho y en muchos casos, la situación podría cruzarse con una violación a la ley 20.000 que dice relación con sanciones al narcotráfico, pues podría considerarse como tráfico de sustancias.

La salud en peligro

La directora del Servicio de Salud Ñuble, Elizabeth Abarca, indicó que "como equipos trabajamos para resguardar la salud de la comunidad, por lo tanto, el no seguir adecuadamente sus tratamientos o comprar medicamentos en lugares no habilitados o informales, constituye un peligro que puede tener consecuencias graves en la salud de las personas. Por tal razón, como institución reforzamos el llamado a la comunidad a que sea responsable y adquiera sus medicamentos en lugares establecidos, ya sea en farmacias privadas y asistenciales de hospitales y Cesfam. Estos siempre deben ser recetados por un profesional de la salud, quien los indicará de acuerdo con la patología que cursa la persona".

En ese sentido, la jefa de la sección de Gestión Farmacéutica del SS Ñuble, Susana Rocha, detalló que debe considerarse también que las condiciones de almacenamiento de los medicamentos no son las mejores en la calle, pues la incidencia climática de temperatura y humedad podrían no ser las más adecuadas para ello.

"Utilizar un medicamento adquirido en la vía pública puede ser riesgoso para la salud de la persona por agravamiento de síntomas, reacciones adversas y riesgo de intoxicación, entre otros peligros. En esa línea, es necesario recalcar que los únicos lugares establecidos y autorizados para la venta de medicamentos son las farmacias, ya que aseguran que las condiciones de almacenamiento son las óptimas", comentó la químico farmacéutico de profesión al respecto.