Patricio Vera Muñoz

Tras el sistema frontal que vivió la región de Ñuble en junio pasado, los equipos especializados de Minvu se abocaron a catastrar la afectación, verificando que el daño de aquel entonces llegó a 1.400 casas con distintos niveles en el territorio. Sólo faltaban 48 viviendas por catastrar cuando apareció un nuevo fenómeno climático que, en resumidas cuentas, devolvió todo el trabajo anterior al punto de inicio.

Al respecto, el seremi de Vivienda, Antonio Marchant, detalló que ya llevaban incluso 242 tarjetas del banco de materiales entregadas y se preparaban para iniciar el proceso de reconstrucción cuando apareció este evento que borró todo lo catastrado de un plumazo.

"Hasta el momento y según la Ficha Básica de Emergencia, hay 173 viviendas afectadas. Eso implica realizar una nueva revisión para detectar a las familias afectadas y a lo mejor, vamos a encontrar algunas que ya recibieron la tarjeta del banco de materiales y fueron nuevamente afectadas, por lo que habrá que entregarles un nuevo beneficio", sostuvo.

El secretario regional explicó que Minvu enfrenta un momento complicado, pues habrá que definir de donde se obtienen recursos para superar la que sería la tercera emergencia que enfrentan este año.

"Con los incendios, el 70% de las viviendas se pierden totalmente y un 30% queda con algún daño, pero en las inundaciones eso es al revés. Nosotros pensamos que deben ser cerca de 60 viviendas las que deben reconstruirse, pero el problema es que muchas de esas casas están en zonas que eran de cauce habitual de los ríos y que ahora, el agua recuperó", precisó.

Marchant apuntó que el trabajo a futuro apuntará a generar un estudio más acabado de la región, donde se definan las nuevas zonas inundables. Ello evitará que las viviendas deban ser reconstruidas más de un vez en sólo un año.

"Nos estamos dando cuenta que las inundaciones están en parcelaciones, en sectores rurales donde el río nuevamente recuperó su cauce y se lo llevó", sostuvo, subrayando que "no solamente tenemos que ver cómo reconstruimos, sino cómo hacemos un estudio en la región; cómo vemos las zonas de inundaciones nuevas que tenemos para poder evitar que tengamos que reconstruir dos o tres veces las mismas viviendas", explicó el seremi.

Nueva FICHA FIBE

Ayer en tanto arribó a la región la subsecretaria de Servicios Sociales, Francisca Gallegos, quien informó que la Ficha FIBE ya se está aplicando en las 21 comunas de la región, de las cuales 12 ya están en fase de digitación.

"Al cierre de mañana (hoy) realizaremos el corte de la primera nómina, a fin de que desde el próximo miércoles se comiencen a pagar los primeros bonos de recuperación. Los montos dependen del nivel de daño producido y el tope corresponde a un millón y medio de pesos", expuso.

La autoridad nacional agregó que el trabajo de catastro aún no permite entregar cifras estimativas de personas con pérdidas materiales, puesto que podrían haber casos de doble afectación. Por lo mismo, indicó que se aplicará una segunda FIBE.

"Es una nueva emergencia y por tanto, hay personas que probablemente reciban un segundo bono respecto del evento climático de junio", dijo.