Cementerio de Chillán se encuentra funcionando al 90% de su capacidad
CRISIS. Autoridad sanitaria no registra solicitudes para ampliar o abrir camposantos. El diputado Felipe Camaño aseguró que los recintos de Bulnes, Yungay y San Carlos están cerca de colapsar.
La capacidad de los cementerios en la región de Ñuble sigue representando una preocupación para las autoridades, aunque en la realidad poco se ha hecho al respecto. Quizás, el caso más complejo es precisamente el del camposanto de Chillán, recinto que se encuentra funcionando al 90% de su capacidad y donde las medidas de ampliación aún no pasan al siguiente nivel de avance.
Según explica el director de Secplan del municipio chillanejo, Carlos Araya, la ocupación del recinto de la capital regional es una de las preocupaciones de la actual administración, por lo que se ha estado trabajando en distintos procesos para concretar la compra de un terreno que permita ampliarlo.
"En estos momentos, estamos identificando el predio y se han realizado tasaciones de 3 expertos externos, así como un informe favorable del director municipal de Control para obtener los fondos necesarios para la compra. Sin embargo, aún estamos resolviendo algunos procesos administrativos antes de finalizar la adquisición", precisó.
Consultada al respecto, desde la seremi de Salud informaron que actualmente no registran solicitudes formales para ampliar o abrir nuevos cementerios en la región de Ñuble, sólo existiendo hasta ahora conversaciones informales sobre la posibilidad de ampliar algún camposanto. Sin embargo, la autoridad sanitaria afirmó que en el trabajo fiscalizador han detectado la construcción de nuevos nichos para aumentar la capacidad de los cementerios y evitar así ocupar el terreno de manera horizontal.
Según dicta el DS N° 357 sobre el Reglamento General de Cementerios, existen distintas normativas que deben ser consideradas en la apertura o ampliación de un camposanto. Entre ellas destacan que deberán ser recintos cerrados con cierres perimetrales de 2 metros de altura como mínimo. Además, el suelo debe ser permeable, parejo y con una pendiente no mayor a 20% y el recinto en sí no podrá estar a menos de 25 metros de una vivienda. Asimismo, el terreno será destinado a cementerio de manera perpetua e irrevocable.
Evitar una crisis
El diputado Felipe Camaño realizó recientemente una intervención en la Cámara de Diputados para referirse específicamente al grado de ocupación que sufren hoy los cementerios ñublensinos. En su exposición, el parlamentario indicó que no sólo Chillán sufre esta problemática, sino que los recintos de Yungay, San Carlos y Bulnes estarían cerca de su capacidad total.
"Necesitamos que la autoridad acompañe a los municipios en el proceso de contar con estos espacios, ya que muchos de ellos cuentan con bajo presupuesto y muchas veces sólo administran pobreza. El derecho a recordar a nuestros seres queridos fallecidos es importante y necesitamos que la autoridad de Salud y Subdere estén presentes en esta planificación, pues de lo contrario, en unos años más viviremos una crisis con este tema", aseguró.
El parlamentario solicitó así oficiar a ambos organismos ya mencionados para hacer llegar la petición a instancias ministeriales y presentar así los planes y programas que sean pertinentes en esta materia y ayuden a superar esta situación.