Mientras siguen en marcha las negociaciones de una tregua entre Hamás e Israel en la guerra desatada tras el ataque masivo del grupo islamista del 7 de octubre, que dejó como saldo 1.600 muertos en territorio israelí, las Fuerzas Armadas del gobieno de Benjamin Netanyahu se concentraron ayer en bombardeos cruzados con Hizbulá, con sede en Líbano.
Esto provocó que la atención bélica pasara desde el sur del país, en Gaza, hacia el norte, desde donde ha habido permanentes ataques del activo grupo proiraní.
La aviación israelí bombardeó ayer una aldea en el Valle de la Bekaa, en el este del Líbano, en su primer ataque contra esa región desde el comienzo de las hostilidades hace más de cuatro meses.
Una fuente cercana a Hizbulá confirmó que el bombardeo tuvo como objetivo la localidad de Haouch Tal Safiye, a apenas 8 kilómetros de la ciudad de Baalbek, uno de los principales atractivos turísticos del Líbano y donde se ubican unas destacadas ruinas grecorromanas patrimonio de la Unesco.
Por su parte, el canal de televisión Al Manar, que actúa como portavoz del movimiento chií, informó de que el ataque ha dejado "víctimas", sin precisar cuántas ni si entre ellas habría algún fallecido.
Según el medio, los proyectiles habrían impactado en un área residencial a medio camino entre Haouch Tal Safiye y la vecina aldea de Adous.
Baja en grupo proiraní
Se trató también del bombardeo israelí en Líbano que ha llegado más al norte desde la guerra que el Ejército israelí y Hizbulá libraron en 2006, hasta las proximidades de la ciudad de Ballbek, en el valle de Bekaa, un bastión de la milicia de chií a unos 100 kilómetros de la frontera israelí.
"Las Fuerzas de Defensa de Israel están atacando objetivos terroristas de Hizbulá en las profundidades de Líbano", indicó un comunicado del Ejército, que luego confirmó que bombardeó bases de la defensa aérea del grupo libanés en el valle de Bekaa.
De acuerdo con esta versión, ayer en la mañana el sistema de defensa israelí "David Sling", especializado en proyectiles de largo alcance, interceptó un misil tierra-aire que fue disparado contra un dron Hermes 450 de la Fuerza Aérea israelí que operaba en el Líbano.
"Tras el lanzamiento del interceptor, sonaron las sirenas en la zona de Alon Tavor, en el norte de Israel. No se reportaron heridos", agregó.
Después se identificó un lanzamiento adicional de misiles hacia el dron, que fue derribado dentro de territorio libanés.
"Las FDI seguirán operando para defender al Estado de Israel de la amenaza de la organización terrorista Hizbulá, incluso en operaciones aéreas sobre territorio libanés", indicó un portavoz militar.
Y más tarde informó que en estas acciones resultó muerto el jefe de la unidad Naser de Hizbulá Hasan Husein Salami, quien comandó ataques contra "objetivos civiles y militares" en el norte".
Hizbulá responde
Tras la ofensiva israelí, Hizbulá anunció haber lanzado 60 cohetes contra un cuartel del Ejército israelí en respuesta a su bombardeo en el Valle de la Bekaa.
"En respuesta a la agresión sionista en las inmediaciones de la ciudad de Baalbek en la Bekaa, los muyahidines de la Resistencia Islámica atacaron el cuartel general de la División del Golán en Nafah con 60 cohetes 'Katyusha'", indicó el grupo en un comunicado.
Hizbulá confirmó además vía Telegram la muerte de dos de sus hombres en los bombardeos del Valle de Bekaa, además de la de Salami.