El tradicional y patrimonial rubro de la alfarería en la tradicional Quinchamalí y Santa Cruz de Cuca, Ñuble, se encuentra de luto, luego de conocerse durante la noche del martes el sensible fallecimiento de Rita Rodríguez Fuentalba, reconocida como Tesoro Humano Vivo hace cinco años atrás por el Ministerio de las Culturas. A raíz de la noticia, es que desde el ministerio a nivel regional, emitieron las condolencias, expresadas a través de la seremi del ramo, Scarlet Hidalgo, quien destacó que Rita Rodríguez realizó la destacada labor desde los 12 años de edad.

"Estamos tristes por la lamentable noticia, la señora Rita era parte de los Tesoros Humanos Vivos que reconocimos como Ministerio de las Culturas en el 2019, quien mantenía la tradición alfarera hasta el último momento. Ella comenzó a los 12 años, y como ella decía: "sirvió para apuntalar la casa". Con el fruto de su trabajo pudo criar a sus hijos e hijas. Durante su vida transmitió el conocimiento a su hija Flor Betancurt, su nuera y su nieta, quienes nos contaban además que tienen la misma mano de la señora Rita, la loza bien pulida", dijo la seremi.

Ahora bien, la secretaria regional agregó que se trata de una tradición que alberga a muchas artesanas que superan los 75 años de edad.

"Son varias las artesanas sobre 75 años que aun trabajan en alfarería en quinchamalí desde sus hogares y siguen transmitiendo el oficio a sus familiares. Desde la dirección regional del Servicio del Patrimonio Cultural y desde la Seremi de las Culturas, trabajamos en forma constante y periódica en el marco Plan de Salvaguardia con las alfareras más jóvenes. El ministerio, a través de sus distintas redes nacionales y regionales, como el instagram @patrimonioinmaterial @alfafereriaquinchamli y @culturas.nuble, nos unimos en su homenaje".

Krishna González

Una baja en los precios del pellet se ha evidenciado en Ñuble este año, debido al gran número de vendedores particulares y empresas que comenzaron a vender este tipo de combustible en la región durante el invierno, según informaron desde rubro. Este panorama contrasta con los de estaciones anteriores, en las cuales el pellet llegó incluso a tener quiebre de stock, a raíz de la alta demanda que este producto suscitó.

Esto ha ocasionado que algunas personas tengan más de lo que llegarán a usar en sus estufas durante la temporada, debido al interés por adquirir combustible a raíz de las bajas temperaturas.

Cristóbal Pino, de la empresa CGP Inversiones SpA, expresó que en años anteriores, los precios iban aumentando en "un 7% anual, sin mayor inconveniente, porque la bolsa era de dieciocho kilos, hasta el año pasado que estas pasaron a quince. Los productores comenzaron a implementar más salas de ventas, hubo más distribuidores, más gente comprando uno o dos camiones (…) y los vendían más caro, lo que les funcionaba y siguen replicando (…) por lo que son muchos los vendedores actualmente".

Además, apuntó que el desabastecimiento que existió durante la pandemia, se relaciona con que las personas estaban más tiempo en la casa. "Hubo un desabastecimiento enorme, porque la gente estaba en la casa, usaba más calefacción y los productores y el mercado, se dieron cuenta de que la capacidad instalada de producción era menor al requerimiento, por eso se dispararon los precios".

Asimismo, Iván Moya, de Clima Chillán, enfatizó la baja en los precios de este combustible que se ha percibido notoriamente en estos meses. "Hay harto stock de pellet (…) este año se masificó ya lo de bajar los kilos, la mayoría es de quince kilos, y de esta el precio redondea en $3.800 a $5.000 dependiendo de las marcas. Hay harto pellet, no habrá déficit este año, la gente se preparó bien (…) hay mayor cantidad de gente que trae pellet, lo que genera bajas en los precios".

También destacó la alta demanda que sigue teniendo este recurso, debido a un importante aumento de estufas en Chillán que lo usan como fuente de calefacción. "Hay mayor demanda, por más estufas mayor es la compra de este (…) hay bastante para asegurarse, no como hace años, que había tres o cuatro lugares donde comprar pellet, ahora ya en todas partes se encuentra, lo que incentiva y motiva a la gente a optar por estas estufas".

Usuarios

Para Marcela Aburto, quien lleva más de dos inviernos utilizando su estufa a pellet en Chillán, la experiencia que le ha dejado el uso de este combustible amigable con el medio ambiente, ha sido mucho más satisfactoria este 2024, ya que la disminución del costo ha sido notoria para su bolsillo. "Había un precio bastante alto, lo compré hasta en $8.000 el saco de quince kilos, pero con el tiempo fue bajando el valor. Además, ahora hay muchas más marcas, pues antes cuando empezó eran como dos o tres las que más se conocían, entonces ahora tú puedes encontrar incluso en el supermercado bolsas por $4.000, lo que sale mucho más conveniente", dijo.

"Los productores implementaron salas de venta, más distribuidores, más gente comprano. Son muchos los vendedores actualmente".

Cristóbal Pino, CGP Inversiones SpA