Beneficios de la tecnología actual también llegan a la agricultura familiar campesina
Ingeniero Agrónomo explicó cómo avances como el Internet ayudaron a mejorar la labor agrícola que se realiza en las zonas rurales.
Es fácil pensar que las personas que se dedican a la agricultura campesina no han modernizado sus métodos de trabajo y mantienen un sistema similar al que se practicaba muchas décadas atrás. La verdad es que en el último cuarto de siglo hay un salto significativo en el uso de la tecnología en estas faenas.
Así lo indicó Camilo Cornejo, ingeniero agrónomo, magíster en Ingeniería y docente de la Universidad Andrés Bello. El profesional señaló que hay que considerar los avances tecnológicos y de conocimiento generados desde la agricultura primitiva, no obstante, a partir de los años 2000 a la fecha, con la expansión del Internet y del fast knowledge, enfocado en la medición de las soluciones, la agricultura tomó un ritmo superior, incrementando la producción por hectárea, generando eficiencia hídrica y disminuyendo el uso de químicos sintéticos, entre otros aspectos.
Pero, sobre todo, y pensando en la agricultura familiar campesina, el Internet y el celular, más aplicaciones y páginas de libre acceso, determinaron mayor implementación de soluciones tecnológicas. "Por ejemplo, algo tan simple como aplicaciones de clima, que entregan estimaciones de humedad, temperatura, precipitaciones, velocidad del viento, entre otros, provoca una planificación para los agricultores", explicó.
Todo lo anterior es relevante, aseguró el profesional, al considerar que la agricultura es el eje central del desarrollo económico en zonas no urbanas de nuestro país. "En su mayoría es agricultura familiar campesina, dedicada por generaciones a este rubro tan importante. ¿De qué nos alimentamos si no hay productores agrícolas que nos puedan abastecer?, ¿podríamos continuar con nuestro estilo de vida?, la respuesta es tajantemente no", afirmó.
Agregó que es por esta razón que es relevante disponer de fondos de desarrollo e incentivo agrícola, más aún hoy, porque la agricultura nacional se ve afectada por cuatro variables. "Primero, el incremento en los costos productivos y de mano de obra; lo segundo, cambio climático; tercero, la falta de comercialización agregada, incrementando valor y utilidades para los agricultores, y cuarto, el cambio generacional y su efecto en el traslado hacia otros sectores no agrícolas", especificó Cornejo.
Como conclusión, el ingeniero dijo que la clave para apoyar esta actividad está en la vinculación público-privado que permita asociación y foco en el desarrollo agrícola campesino, sin dejar de lado a los grandes agricultores.