Iglesia llama a "un gran acuerdo" por la seguridad y el Gobierno dice coincidir
TE DEUM ECUMÉNICO. Los casos de corrupción en el Poder Judicial también fueron tema en la homilía por Fiestas Patrias, así como la cesantía, el trabajo informal y los proyectos de Ley de aborto y eutanasia. La Moneda y la oposición pidieron unidad.
El arzobispo de Santiago, Fernando Chomalí, pidió ayer en el Te Deum Ecuménico por Fiestas Patrias "un gran acuerdo nacional" frente a la crisis de seguridad, porque "no hay desarrollo posible, ni una auténtica democracia en un país violento y con gérmenes de corrupción". El Presidente Gabriel Boric se unió al llamado a la unidad por estos días y la ministra vocera, Camila Vallejo, agregó que "las cosas que nos hacen coincidir son muchísimas" y "anoté varias cosas" de la homilía.
El líder de la Iglesia reflexionó que "hoy, por lejos, lo que más preocupa es la seguridad. Nadie se siente seguro, nadie puede garantizar que no le harán un portonazo, un turbazo, una encerrona, o que no lo asaltarán. Chile no se acostumbra, y no se acostumbrará, a los descuartizados, los asesinatos a plena luz del día".
Por esto, advirtió Chomalí, "si no hay una acción en conjunto de la sociedad, el país corre el riesgo de convertirse en rehén del crimen organizado", ante lo que "se requiere actuar ahora, porque está a la vista el poder del crimen organizado en Chile, sus estructuras de muerte, sus vínculos internacionales: mientras más divididos estemos más espacio le damos al crimen organizado".
El arzobispo apuntó como una de las causas de esta situación que "la corrupción se ha ido enseñoreando de lugares que por su naturaleza debiesen ser intachables", en alusión a la crisis en la Corte Suprema por el Caso Audios, donde jueces arriesgan acusaciones constitucionales por vínculos con el imputado Luis Hermosilla.
"Chile está escandalizado al ver tanta avaricia y ansias de poder que no trepidan en sobornar, en valerse del cohecho para lograr sus objetivos, y en el tráfico de influencias. Qué daño a la fe pública, a la democracia, al Estado de Derecho le hacen los escándalos de corrupción y abusos de toda índole", destacó Chomalí frente a los líderes de diversos credos, la sociedad civil y militar.
En la misma línea, tras la ceremonia Vallejo señaló que "tenemos una agenda de seguridad y una agenda anticorrupción, en gran parte esa ya se ha ido presentando en el Parlamento, la agenda de probidad, pero también va a venir en octubre una agenda de reformas en materia judicial y, por lo tanto, tenemos que mirar con sentido de unidad, dejando las trincheras de lado".
La ministra del Interior, Carolina Tohá, escribió en X que las palabras del arzobispo son "un llamado contra el pesimismo y también el conformismo. Una invitación a construir caminos mediante el diálogo y la unidad para enfrentar el crimen organizado y la corrupción".
"Ningún esfuerzo será suficiente hasta que los habitantes de nuestro país salgan sin miedo a las calles", agregó la autoridad. "Chile no debe acostumbrarse jamás a la violencia".
El presidente del Senado, José García Ruminot (RN), subrayó que "nos hemos hecho cargo de la agenda de seguridad que viene del año pasado. Quedaron proyectos pendientes, los que nos interesan que vean la luz".
El diputado de la misma colectividad, Diego Schalper, añadió en X que el "mensaje de Chomalí pone los acentos correctos".
Jóvenes y trabajo
El arzobispo dijo que "mi primera gran preocupación son los jóvenes (...) Las manifestaciones de rabia que vemos día a día en muchos de ellos no son más que el efecto del abandono en que se encuentran. Hay un grupo importante que no ve horizonte de futuro en sus días y no se siente parte de la sociedad. Les comparto una cifra dramática: en Chile 400.000 jóvenes entre 15 y 24 años no estudian ni trabajan".
En este escenario, sostuvo Chomalí, "duele el alma ver cómo se cierran industrias y, con ello, los sueños de tantos", en referencia al apagado de hornos en la acerera Huachipato, en la Región del Biobío. Esto genera "precariedad laboral de muchos, informalidad y escasez de soluciones a mediano y largo plazo. El comercio ambulante ilegal no es un tema sólo municipal, ni mucho menos sólo policial, es un tema de políticas públicas de largo aliento y que lamentablemente se encuentran fuera del debate".
Pensiones y eutanasia
La autoridad eclesiástica también agradeció a los ancianos "que han contribuido grandemente en la construcción de la nación que tenemos hoy. Muchos de ellos están solos, enfermos, pobres y, lo que es aún más duro, en el más absoluto abandono, con pensiones muy por debajo de lo que necesitan para vivir dignamente. ¿Cómo no abrirse a un debate sereno respecto de las pensiones donde prime un espíritu solidario?".
La ministra del Trabajo, Jeannette Jara, citó estas palabras en X y apuntó "que así sea", mientras el líder del Senado agregó que "esperamos poder votar en enero, quiero recordar que lo que recibimos (en el proyecto del Ejecutivo) fue un verdadero cascarón".
Chomalí pidió además "por todos aquellos que no tienen voz, desde los niños no deseados en el vientre de sus madres, hasta los ancianos descartados que dan su último suspiro", en referencia a los proyectos de Ley de aborto y eutanasia, porque este último el Gobierno anunció que lo presentará durante los próximos días.
Vallejo respondió que "respetamos en el marco de la libertad de expresión y de culto que existe en nuestro país, pero es una diferencia que no nos enceguece respecto a la enorme cantidad de coincidencias que tenemos de ese discurso".