Se acabó oficialmente la temporada 2024 del fútbol chileno con la final de la Copa Chile de anoche entre Universidad de Chile y Ñublense, disputada en el Estadio Nacional de Santiago ante más de 45 mil personas, la gran mayoría de las cuales, insólitamente, eran hinchas del cuadro universitario. Los dirigidos por Mario Salas, en desventaja desde la gestión, cayeron por la cuenta mínima ante los laicos y, si bien estuvieron cerca de remontar (le anularon un gol de forma polémica a Patricio Rubio) cayeron por la cuenta mínima por el solitario golazo de Charles Aránguiz.

Así las cosas, los Diablos Rojos regresaron desde Santiago con la cara larga, masticando la desdicha de la derrota y la amargura de no poder terminar un año con una trofeo nuevo dentro de sus vitrinas. Sin embargo, sí está la gran emoción de volver a disputar la Copa Libertadores, lo que es gran motivo de felicidad para sus hinchas, que comentaron al respecto.

Ignacio De La Fuente, hincha del Rojo, afirmó que "desde la previa del partido que todo ya estaba dando una sensación algo amarga, pero ver a tu equipo jugar una final no deja de ser eso. Había mucha ilusión y creo que dentro de todo Ñublense fue un muy digno rival, pero lamentablemente no se pudo. Además el gol de Rubio está bien anulado".

Otra hincha de Ñublense, Rafaela González, afirmó que la U era más que digno campeón, pero que también se puede descansar en la clasificación al torneo internacional para no sufrir demasiado por el resultado adverso.

"Obviamente que haberle ganado la final a la U hubiese sido increíble, más aún considerando el tema de la gestión, como jugaron de local y en un estadio que supuestamente tenía que ser neutro, pero ya el hecho de ir a Copa Libertadores es un sueño hecho realidad. La gente no dimensiona que Ñublense va a jugar su segunda Copa Libertadores en tres años. Jamás lo hubiese creído si me lo contaban cuando estábamos en la B aún", afirmó.

Las opiniones de otro hincha de los Diablos Rojos, Andrés Salazar, van de la mano con la de De La Fuente y González. Salazar afirma que el año del Rojo estuvo lejos de ser uno tranquilo, pero que el balance final es más que positivo.

"Creo que fue un año bien raro, la verdad. En un momento estábamos hasta cerca de pelear el descenso y se veía como un peligro muy real. Me acuerdo que hasta fui de los que pedía la partida de Mario Salas del club y me imagino que no seré el único. Pero a esta altura del año se puede decir que terminó siendo una buena temporada. Terminamos sin pasar mucho susto, más allá de que no pudimos terminar en puestos más avanzados en el torneo nacional. Pero sí pudimos llegar a la final de la Copa Chile y no puede pasar desapercibido que vamos a jugar otra Copa Libertadores. Ñublense no es un club como lo son los tres grandes de Santiago a los que se le exige año a año como mínimo clasificar a un torneo internacional, entonces si se nos da, bienvenido sea. Así que ahora solo hay agradecimiento".

EL POLÉMICO DÍA PREVIO

Por otro lado, los hinchas también opinaron sobre lo que fueron los días previos del partido. González enfatizó en que, si bien por su situación laboral no podía optar por entradas, fue algo que dejó mucho que desear.

"Es bien raro que un partido que tenía que ser con estadio neutro y con hinchada neutra se haya organizado como se organizó. La U iba a ser local en el estadio que fuera y contra el equipo que sea, salvo Colo-Colo, y lo hicieron en el Estadio Nacional. Además era un puñado de hinchas de Ñublense comparado con los de la U. Entonces dejaron mucho que desear con esto".

Finalmente, los hinchas coinciden en que a Ñublense se le puede exigir en torno a este logro el próximo año. Si bien están de acuerdo en que a Ñublense no hay que demandarle pelear el torneo, sí se le debe exigir pelear más arriba en torno a los puestos de Copa Sudamericana que peligrar con los puestos de descenso, como dijo Salazar. "Hay que construir este plantel, cuidar a jugadores como Rubio, Pérez y Graciani, dijo De La Fuente".

37 minutos tuvieron que pasar para que

60 Charles Aránguiz