Aunque el Presidente Gabriel Boric buscó no escalar la polémica con Argentina luego de que las autoridades de ese país usaran duros términos para referirse a él y al Gobierno que encabeza, el canciller Alberto van Klaveren reconoció ayer que las relaciones entre ambas naciones "no pasan por el mejor momento".
El jueves el ministro de Economía trasandino, Luis Caputo, aseguró que a los chilenos "hoy los gobierna prácticamente un comunista que los está por hundir". Y esto luego fue reforzado por el mandatario Javier Milei, quien en su cuenta de la red social X destacó lo dicho por su ministro con el mensaje "poniendo zurdos en su lugar".
El mismo día el Presidente Boric le pidió a su homólogo "un poquito más de humildad porque nosotros, los presidentes, pasamos pero los pueblos quedan" y descartó una enemistad al afirmar que Argentina "para mí y todos nuestros compatriotas es un país hermano".
Ayer el jefe de la diplomacia nacional, si bien mantuvo la postura no confrontacional y afirmó que "el Presidente ya cerró el tema muy adecuadamente, por cierto", reconoció que "por cierto, (las relaciones entre ambos países) no pasan por el mejor momento, eso está muy claro. Hay un intercambio que ha sido áspero, pero yo creo que puede superarse".
En la misma línea de no agresión se mostró la ministra Secretaria General de Gobierno, Camila Vallejo, quien recordó que "en las relaciones entre presidentes que representan Estados, países, pueblos, es fundamental para nosotros al menos siempre hablar en positivo, con respeto, pero eso no significa tolerar los insultos, las provocaciones ni las descalificaciones".
Apoyo UDI
El Ejecutivo informó que no se han considerado medidas contra la misión trasandina en Chile y de hecho ayer el embajador de ese país, Jorge Faurie, acudió a la casa de Gobierno con motivo de la conmemoración de la fiesta judía de Janucá.
Ante esta postura, el presidente de la Comisión de Relaciones Exteriores del Senado, José Miguel Insulza (PS), opinó que "no creo que haya que tomar medidas. Desgraciadamente, da muestra de que hay gente del mundo político en América Latina, y en Argentina especialmente, que se excede mucho en el lenguaje".
Ayer se emitió una declaración de respaldo hacia Boric por parte de diputados de la UDI: a través de una carta firmada por los legisladores Cristhian Moreira y Cristián Labbé en representación de la bancada gremialista, se cuadraron con La Moneda respecto a los comentarios de políticos trasandinos.
"Nos parece esencial dejar en claro que si bien podemos coincidir en gran parte con el fondo de los cuestionamientos realizadas por las autoridades argentinas, no es la manera más adecuada para manifestar una crítica por más legítima que sea", expresaron los parlamentarios en el texto.
"No corresponde que las autoridades extranjeras se inmiscuyan en los asuntos internos de un país, menos aún tratándose de dos naciones que mantienen una directa relación", añadieron antes de calificar las palabras de representantes del gobierno trasandino como "una grave intromisión que vulnera el principio básico de la no injerencia en los asuntos internos de otros países" y "una ofensa hacia el Estado de Chile".
Se firmó acuerdo con Bolivia
El Ministerio del Interior informó de un acuerdo de cooperación migratoria con Bolivia, que permitirá la salida de los migrantes que hayan sido expulsados de Chile. El convenio incluye que ambos países aceptaran el retorno o reingreso, además de nacionales, de extranjeros de terceros países. Con esto, Bolivia permitirá el reingreso a su territorio de personas de terceros países, lo hasta ahora no era posible y se había convertido en una de las grandes trabas para el control fronterizo terrestre contra la inmigración ilegal.