Una de las preguntas más frecuentes que recibimos quienes representamos a la Cámara Chilena de la Construcción (CChC) es: ¿Qué hacemos como gremio? Y aunque es difícil explicar en detalle todas las áreas en las que trabajamos, creo que un buen ejemplo de nuestra labor es el programa Construyo Mi Futuro, que impulsamos desde el Consejo Social de la CChC Ñuble con el apoyo de la ONG Educando en Red. Este programa refleja de manera clara nuestro compromiso con la formación de nuevas generaciones de profesionales que sean parte del crecimiento y desarrollo del país.
Desde hace más de dos décadas en Ñuble, el gremio ha jugado un rol importante en el desarrollo económico, social y urbano de nuestra región. En un sector como el de la construcción, que constantemente está en evolución, resulta necesario preparar a los jóvenes para enfrentar los desafíos de un mercado laboral competitivo. Construyo Mi Futuro es una muestra de cómo, a través de la educación y la capacitación, buscamos entregar a los estudiantes herramientas que los preparen para ingresar al rubro de la construcción con el conocimiento y las habilidades que necesitan para alcanzar el éxito laboral.
Actualmente, estamos trabajando con seis liceos técnicos profesionales (TP) en la región, impactando a más de 1200 estudiantes de Segundo, Tercero y Cuarto Medio. Este trabajo conjunto entre los liceos y nuestro gremio han dado vida a diversas actividades de capacitación, orientación y desarrollo de habilidades. Uno de los pilares de este programa son las charlas de orientación vocacional, que permitieron en 2024 que los estudiantes descubrieran más sobre las diversas oportunidades que ofrece la industria de la construcción.
No solo nos centramos en los alumnos, sino también en los docentes. Sabemos que el rol de los educadores es fundamental para el éxito de estos jóvenes, por lo que también hemos implementado capacitaciones especializadas para ellos.
Entre las actividades que más impacto han tenido en los jóvenes estuvo las visitas a obra, una experiencia que permitió a los estudiantes vivir en terreno lo que normalmente solo conocen desde las aulas de clases. Empresas socias de la sede Ñuble abrieron sus puertas para que pudieran aprender directamente en los proyectos en ejecución, siempre bajo estrictas medidas de seguridad.
Además de lo técnico, consideramos fundamental el desarrollo de habilidades socioemocionales y sociolaborales en los estudiantes. En 2024, centenas de jóvenes participaron en charlas técnicas donde no solo aprendieron sobre construcción, sino también sobre la importancia de la comunicación, el trabajo en equipo, la resolución de conflictos y la ética laboral.
Este es solo un ejemplo de las muchas iniciativas que la CChC realiza a lo largo del año en beneficio de toda la comunidad. En este 2025, seguiremos trabajando con el mismo compromiso, impulsando proyectos que beneficien a las nuevas generaciones y contribuyan al desarrollo de un Ñuble más seguro y próspero.
Jorge Figueroa Moreno,